Es normal que las personas al tener un accidente, una situación negativa en su alrededor, o cualquier tipo de problema, busquen contar con profesionales que verdaderamente valen la pena y los ayuden a velar por sus derechos.
Por ello, es importante contar, en caso de sufrir lesiones personales en Nueva York, con un especialista o abogado que te ayudará no solamente a tomar decisiones que te ayuden a tu estado actual, sino para que logres recuperar el ritmo de tu vida en las semanas posteriores al suceso que ha ocurrido.
En el estado de Nueva York, la legislación sobre lesiones personales es notoriamente compleja. Los plazos legales para la presentación de demandas (Statutes of Limitation) varían considerablemente según la naturaleza del caso, las compañías de seguros suelen ser adversarios reacios a colaborar, y la compensación que finalmente obtengas estará directamente ligada a la habilidad con la que tu representante legal defienda tu reclamo.
De alguna manera, así como preservar tu vida se ha convertido en algo importantísimo para ti, también lo debe ser la elección correcta de un abogado, quien te ayudará en un proceso largo.
¿Qué debe tener un abogado escogido en el caso de tener lesiones personales?
Hay elementos que no se deben dejar al azar. Si bien es cierto que la responsabilidad del caso reposará sobre quien contrates, también hay muchos aspectos que se deben mirar antes de tomar la decisión de usar un abogado o equipo legal en particular para la situación.
A continuación, aquí te van algunos aspectos a tomar en cuenta:
Comprender el Alcance de la Práctica de Lesiones Personales
Antes de iniciar tu búsqueda activa, es fundamental entender el rol que desempeña un abogado en este campo. Un abogado de lesiones personales representa a individuos que han sufrido daños corporales o psicológicos como resultado directo de la negligencia, imprudencia o mala conducta de un tercero. Los casos que manejan habitualmente incluyen:
- Accidentes de tráfico (coches, camiones, motocicletas y embarcaciones).
- Incidentes por resbalones, tropiezos y caídas (slip and fall).
- Lesiones y accidentes graves en el lugar de trabajo, especialmente en obras de construcción.
- Casos de responsabilidad por productos defectuosos.
- Agresiones y lesiones causadas por animales (p. ej., mordeduras de perro).
- Casos de Muerte por Negligencia (Wrongful Death).
- Negligencia Médica (Medical Malpractice) y abandono en asilos de ancianos.
Un punto crucial a considerar en Nueva York es el sistema de honorarios de contingencia. Esto implica que el cliente solo debe pagar los honorarios del abogado si este logra obtener una compensación (ya sea mediante un acuerdo o un veredicto favorable). Cuando esta consideración está tomada en cuenta y se accede al caso, puedes estar seguro que se hará lo posible por darte la victoria.
Buscar Experiencia Específica en la Jurisprudencia de Nueva York
Cada estado posee normativas únicas para la presentación y litigación de reclamos por lesiones. La legislación de Nueva York, en particular, presenta complejidades notables en áreas como la negligencia contributiva, el mandato del seguro sin culpa (no-fault) y los ya mencionados Statutes of Limitation.
Por ello, la prioridad debe ser encontrar un abogado que no solo esté licenciado en el Estado de Nueva York, sino que también maneje con regularidad casos idénticos o muy similares al tuyo. Un experto en reclamos por accidentes de tráfico en Nueva York sabrá cómo:
- Gestionar y cumplir rigurosamente con los requisitos específicos del seguro no-fault.
- Demostrar de manera efectiva que tus lesiones cumplen con el umbral de lesión grave que exige la ley estatal para poder demandar más allá de los beneficios no-fault.
- Identificar y reclamar correctamente todas las categorías de daños a las que tienes derecho, incluyendo gastos médicos futuros, salarios perdidos y compensación por dolor y sufrimiento.
Es importante que hagas preguntas referentes a si los abogados tienen experiencia en los tribunales de Nueva York. Solo de esa manera, tendrás una respuesta mucho más clara.
Evaluar la Trayectoria en Juicios y Litigios
Aunque la gran mayoría de los casos de lesiones personales se resuelven mediante acuerdos extrajudiciales, algunos sí llegan a la fase de juicio, especialmente cuando las aseguradoras se niegan categóricamente a ofrecer una compensación justa.
Un abogado con experiencia probada en litigios locales está mejor capacitado para negociar desde una posición de fuerza. Las compañías de seguros están perfectamente al tanto de qué abogados están genuinamente dispuestos a ir a juicio, por lo tanto, la experiencia, resultados obtenidos en veredictos anteriores y el historial de juicio es crucial.
Analizar la Reputación, Credenciales y Recursos
La reputación de un bufete es un indicador poderoso de la calidad del servicio. Los clientes anteriores pueden ofrecer información valiosa sobre el trato, la ética y la comunicación del equipo legal.
Reputación y Reseñas
- Busca reseñas en línea en plataformas públicas como Google, Avvo o Martindale-Hubbell.
- Presta atención a los patrones en las opiniones: si múltiples clientes mencionan comunicación oportuna, empatía o resultados positivos, es una buena señal. Las quejas recurrentes sobre falta de seguimiento o llamadas sin respuesta son una señal de advertencia (red flag).
Estatus y Credenciales
- Verifica que el abogado esté en buen estado con el Colegio de Abogados del Estado de Nueva York (New York State Bar) utilizando las herramientas de búsqueda del Sistema Judicial Unificado de Nueva York.
- Busca membresías activas en organizaciones profesionales como la New York State Trial Lawyers Association (NYSTLA) o la American Association for Justice (AAJ). Estas afiliaciones demuestran un compromiso con la formación continua y la práctica ética.
Recursos del Bufete
Un bufete con los recursos adecuados es fundamental para investigar tu reclamo a fondo. Pregunta si tienen capacidad para colaborar con expertos de otras áreas, como:
- Consultores Médicos: Para evaluar el alcance total de tus lesiones.
- Expertos en Reconstrucción de Accidentes: Para establecer la secuencia de eventos.
- Economistas y Expertos Vocacionales: Para calcular las pérdidas salariales futuras y los daños económicos a largo plazo.
Solo los que tienen los mejores programas y presupuestos, son los que te darán mejores resultados en un caso de este tipo.
El Proceso de Selección: Consulta, Preguntas y Honorarios
La mayoría de los bufetes de lesiones personales en Nueva York ofrecen una consulta inicial gratuita. Esta es tu oportunidad principal para evaluar al abogado.
La Consulta Inicial
Acude a la reunión con toda la documentación posible, incluyendo: informes policiales, fotografías del lugar y de tus lesiones, registros médicos y cualquier correspondencia con las aseguradoras. Durante la reunión, evalúa:
- Interacción: ¿El abogado te escucha con atención? ¿Evita la jerga legal innecesaria? ¿Muestra un interés genuino y empatía hacia tu situación?
- Claridad: ¿Te explican claramente las fortalezas y debilidades de tu caso, incluyendo los desafíos potenciales?
Preguntas Cruciales
En el caso de que seas una persona que tiene sus dudas bastantes clara, es importante que las personas practiquen algunas interrogantes antes de firmar un contrato o comenzar a trabajar juntos:
- ¿Cuánto tiempo lleva practicando en Nueva York? ¿Ha manejado casos similares y cuáles fueron los resultados?
- ¿Quién será el abogado principal: usted o un colega del bufete? ¿
- ¿Cuánto tiempo estima que tomará mi caso? ¿Qué desafíos legales específicos anticipa para este reclamo?
- ¿Cuál es el porcentaje exacto de los honorarios (generalmente entre 33% y 40%)?
Puede que algunas personas consideren que esta información o interrogantes son algo directas. Sin embargo, es una de las maneras claves para lograr obtener una respuesta clara y verificar que en efecto, están capacitados para llevar tu caso.
Consideraciones Adicionales: Ubicación y Sentido Común
Familiaridad Geográfica
Si tu caso se centra en un área específica de Nueva York (Manhattan, Brooklyn, Queens, Long Island o el norte del estado), un abogado familiarizado con los tribunales, los jueces y los abogados defensores locales puede ser una ventaja significativa, facilitando la fluidez del proceso.
Desconfiar de la Publicidad
No bases tu decisión exclusivamente en anuncios llamativos, vallas publicitarias o comerciales de televisión que prometen acuerdos millonarios. La publicidad genera conocimiento, pero no siempre refleja la calidad de la representación. Algunas firmas de alto volumen pueden delegar excesivamente en paralegales, ofreciendo menos atención personal. Usa la publicidad como punto de partida, pero deja que la experiencia y la comodidad personal guíen tu decisión final.
Confía en tu Instinto y Compara
Si durante la consulta sientes que el abogado está impaciente, es evasivo o no inspira confianza, es mejor seguir buscando. La relación abogado-cliente debe estar cimentada en la confianza y el respeto. Tómate tu tiempo: consulta con dos o tres abogados diferentes y compáralos en términos de experiencia, estrategia propuesta y estilo de comunicación antes de comprometerte.
Conclusión
En definitiva, aunque el proceso de seleccionar a un abogado de lesiones personales en Nueva York pueda sentirse inicialmente complejo, su éxito se fundamenta en una diligencia debida minuciosa y estratégica. El camino hacia un resultado favorable se asegura priorizando factores innegociables: la experiencia específica en la ley neoyorquina, una comunicación efectiva y transparente, una reputación intachable en el ámbito legal, y la dedicación inequívoca del bufete a tu caso.
Si te enfocas en conseguir un profesional que no solo escuche tus preocupaciones con atención, sino que también respalde su compromiso con un historial comprobado en casos idénticos al tuyo, obtendrás la indispensable tranquilidad de saber que tu reclamo está siendo manejado con la máxima competencia. Hay que tomar en cuenta que los usuarios solo tienen una oportunidad legal para procurar la compensación justa por sus lesiones, y la elección del mejor abogado posible es el factor que aumentará las probabilidades de éxito.